Samantha Rey
Lectura: 4 min
Oscar Flores, un artista de pies a cabeza que siente la danza oriental como parte de su vida. Influencer en redes sociales, ha sido coach artístico en programas de televisión y ha viajado por todo el mundo impartiendo clases y talleres para acercar este tipo de danza, aún muy encasillada como una danza para mujeres, a todos los públicos.
A través de esta entrevista conoceremos a un Oscar Flores muy humano, profesional y sobretodo artista, que ha sabido adaptarse a los cambios desde siempre.
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¡RESERVA UNA DEMO AHORA!Este año, con el Coronavirus mi vida profesional cambió por completo y me “obligó” a adaptarme a la situación. El año anterior estuve en más de 28 países, viajaba fuera de España cada fin de semana durante todo el año. Éste, había pedido al universo un poco más de tranquilidad ¡y mira, cuando le pides algo al universo debes ser muy claro sino te puede salir mal! - dice entre risas-.
Este año seguí trabajando sin moverme de casa. Siempre tengo un plan B, en este caso fue digitalizar mi escuela al 100% porque hacía tiempo que tenía en mente ofrecer mis clases en formato online.
Hace que bailo 25 años. Hacía teatro y comedia musical, también bailaba flamenco. Sabía que quería ser artista pero no sabía si el público me iba a dar la posibilidad de vivir de esto. Si un artista no tiene público no es un artista y siempre lo tuve bien claro.
Yo soy técnico en comercio exterior, soy despachante de aduana y comencé a trabajar en el Banco Santander de Argentina manejando toda la cartera inmobiliaria de la Patagonia, y me encantaba mi trabajo, pero siempre lo compaginé con mi pasión por el baile y el teatro.
En 2009 al finalizar una gira me di cuenta. Me ponía a llorar solo con pensar que tenía que volver al día siguiente a trabajar en el banco. El resultado fue que, por primera vez, no me presenté en el trabajo, ni tampoco los siguientes días. Quería tomar las riendas de mi vida y me di cuenta de que me estaba asfixiando. Lo intenté unos días más pero iba por la oficina que parecía un zombie.
A partir de ese momento y después de hablar con mis jefes, incluido el presidente del banco, me dieron la oportunidad de probar durante dos años de excedencia. Si pasado ese tiempo quería, podría volver al banco pero tendría que dejar de bailar. Poco después firmé mi libertad y jamás volví.
Yo siempre he sido de gestionar mis cosas y ahorrar. Soy economista y siempre me analizo como una empresa, por eso siempre estoy buscando proyectos y nuevas ideas. Ya tenía una escuela en Argentina pero hace 3 años me reuní en Grecia con representantes de la Unesco y les presenté un proyecto que consistía en todo el contenido de mi escuela en formato online. Esto era así porque estaba viviendo en China y muchos de mis alumnos me pedían poder seguir mis clases online.
Cuando yo les conté esto, la gente de la Unesco se quedó un poco sorprendida porque en la danza oriental no había un contenido tan ordenado y estructurado como lo que yo tenía. Mi programa era de 5 o 6 años y lo que ellos buscaban era de 3. Después de llegar a un acuerdo comencé a grabar el contenido de cada una de las 450 clases que tenía en mi programa, ¡imagínate! Me compré todo el material, cámaras, luces, telones, todo y me faltaba una plataforma donde volcar todo este material, ¡y encontré Kydemy!.
Yo soy muy apasionado por las relaciones humanas y a pesar de que todo el material está grabado yo complemento con clases en vivo. Dedico media hora a preguntar cómo están, a presentarlos entre ellos. Cuando es el cumpleaños de alguien le cantamos la canción juntos. Trato de generar vínculos humanos entre la virtualidad. Me intereso mucho por ellos. Cada alumno tiene un link privado de contacto directo conmigo a través de vídeo para hablar. Se sienten cuidados.
¡Yo soy muy natural frente a la cámara! Todo lo contrario a ser serio. No sienten que están viendo un vídeo grabado. Me muestro como una persona que les está ayudando y no como un profesor sin más. Esto genera empatía. Es la didáctica que uno desarrolla durante los vídeos. Yo hablo con mis alumnos como si estuvieran allí durante mis clases grabadas, “¡¿les gustó la clase?!”, si me equivoco dejo las equivocaciones, hago chistes, hago que lo pasen bien.
¡A mi Kydemy me lo ha aportado todo! Mis alumnos están encantados, se sienten dentro de un grupo. Una de las cosas que más me gusta de la aplicación es que yo puedo ir eligiendo los importes de las cuotas. Esto me permite adaptarme a la situación de cada alumno. Tengo una pareja que perdió el trabajo por el Coronavirus, y les pude bajar la cuota para que no dejen de bailar hasta que mejore su situación.
Hay una ventaja muy importante para mi que es la comodidad del alumno de poder disponer de esta aplicación tan ordenada y fácil de entender. El feedback de los alumnos es espectacular. No hay ni un alumno que me haya dicho algo malo de la aplicación. Están encantados.
Además, yo paso los fines de semana en Sitges no en casa. Para mi es tan cómodo abrir mi ordenador, entrar con mi clave y responder a un alumno, gestionar un pago, hacer un cambio… ¡Eso es maravilloso! No es algo rígido que solo tengo en un ordenador. La gestión es muy cómoda.
Las opciones que hay de administración son maravillosas, los tipos de pago que acepta la plataforma me permite registrar todos los tipos de pago y a final de mes ya tengo todo calculado. Me descargo mi excel y lo mando al banco para la liquidación de impuestos, ¡qué más puedo pedir!. Me ha ayudado un montón.
Yo me reuní con 6 o 7 empresas diferentes que hacen esto de gestión online y cuando les explicaba el volumen de cosas que necesitaba tener dentro de sus plataformas, ¡salían corriendo! Tener más de 500 horas de contenido lo veían imposible.
Nadie me aportó la seguridad y profesionalidad que encontré con vosotros.
Sí claro. Yo es lo que voy hablando con amigos que tienen escuelas. Cuando estoy con ellos abro mi plataforma y les muestro como yo opero en mi plataforma y les encanta.
El problema es que ahora muchas escuelas están pasando por la situación de “abro-cierro”, “abro-cierro” y no se animan a generar ningún pago mensual extra porque no saben lo que está pasando.
Cuando todo esto se tranquilice y acabe este año tan complejo las escuelas se animarán. Tenemos un buen producto, ustedes y yo, y en algún momento comenzaremos a cosechar cosas muy positivas.
Al fin y al cabo, por mucha saturación que haya en redes sociales y en el mercado en general, cuando la gente tenga de nuevo estabilidad preferirá la calidad de productos como éste.
Una entrevista que deja con ganas de más, ¡Muchas gracias Óscar Flores!
Si queréis saber más sobre la escuela online de Oscar Flores os dejamos el link a su perfil de Instagram
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Nos ponemos a tu disposición para responder a tus preguntas y aclarar todas tus dudas.
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